Llega el día más crítico de todas las vacaciones o fines de semana, ese día que has temido y que te venía acechando desde hace tiempo. Sin embargo, el peor momento es por la tarde, cuando ves que todo llega a su fin, lo empiezas a ver todo negro y de repente como por arte de magia, te das cuenta de que tienes grandes cualidades para recordar cosas, pues deberes, trabajos y exámenes te empiezan a asolar la cabeza. entras en una especie de pánico, un intento (casi siempre fallido) de organizarte y ponerte a hacer cosas, pero eres incapaz, es como si no tuvieras fuerzas y estuvieras esperando el castigo del día siguiente, cada vez mas inevitable. Estas fuerzas vuelven sobre las 11 de la noche pero las juergas de los días anteriores pasan factura y en una hora estas derrotado y tumbado en la cama, ¿resultado del día siguiente? desastroso. Estos somos en noventa por ciento de la gente. Sin embargo, existe otro diez por ciento que no se sabe como la tarde del domingo ya lo tienen todo hecho y aprovechan para burlarse del otro porcentaje mayoritario, yo me pregunto ¿es esta gente humana?, ¿ serán extraterrestres? de un modo u otro hemos de aprender de ellos.
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